Sábado 13 de Noviembre, mal número como para afrontar una ruta tan exigente, pensé en alguna ocasión durante la semana previa. No obstante, lejos de todo pronóstico, y tras una intensa semana de frío y lluvia, se nos presentaba una jornada despejada y de temperatura apacible, pese a nuestras vestimentas que en parte engañaban,...
Valdepeñas amanecía como suelen hacerlo los pueblos situados en un valle por estas fechas, cubierto con una suave neblina, que hacía más bonita si cabe su estampa, aunque ya sabemos que en este sentido yo no soy nada objetivo y se me ve el plumero como no podía ser de otro modo.
Esta vez si que fuimos puntuales y no hicimos esperar tontamente a nuestro gran anfitrión, Aniceto, un paisano al que hace casi un par de décadas tuve de profesor y con el que afortunadamente hoy día me vuelvo a reencontrar gracias al amor que ambos profesamos por los pedales.
Una docena de alcalaínos, o pseudoalcalainos, jejeje... nos desplazamos con la intención de hincar la bandera notinguera en todo lo alto de esa antigua base americana, en el infierno del Sur, y si que lo conseguimos sí,... como dice Andrés, desde el sábado pasado "La Pandera es Notinguera".
Junto a nosotros afrontaron este reto otros dos paisanos más, muy jovencitos por cierto, uno de ellos además bastante conocido ya en este mundillo de la bicicleta, Joaquín Torres, el chaval que tantas alegrías está dando ya a los aficionados al ciclismo de la Sierra Sur, con sus triunfos tanto a nivel autonómico como nacional,... por cierto que aparecía luciendo los colores del combinado nacional, no olvidemos que ya es habitual seleccionado en su categoría. Con él otro chaval del pueblo, y que tampoco rueda nada mal, Francisco creo que me dijo que se llamaba,... si no es así espero que me disculpe.
De los nuestros, la gran promesa, Gonzalito, uno nuevo, Carlos Puche, y su tocayo Carlos Rueda, Morón, José Manuel, Gustavo, Pelusilla, El Chirri, Andrés, Bolivar, Pitchot y Manuel (un servidor).
A escasos kilómetros de empezar la ruta, tomamos el carril emposlado del Torcal, y de repente pasamos de rodar tranquilamente a escalar rampas que han de rondar el 20%. Espero que Carlos desmienta o confirme estos datos pero por ahí debían de andar. En esos primeros metros empezamos ya a disfrutar de paisaje y paisanaje, como decía Aniceto, los dos grandes objetivos propuestos en la jornada de hoy. Pasamos por una zona preciosa, y que aún así no fue merecedora de retrataura, pues el desnivel impedía cualquier intento de echar mano a la talega y sacar la Polaroid. Lástima, pues entre los escasos huecos que dejaban los ocres de las nogueras, el verde del suelo, el gris plata del agua, y el marengo de las piedras, aparecían al fondo, como en perspectiva caballera y en otro gris mas azulado, las faldas de la Pandera. Continuamos rodando por encima de un yacimiento arqueológico, pues justo en ese punto, junto a una era, me comentaba Aniceto que se habían hallado restos de un antiguo asentamiento,... ya no sé de que cultura, ni de cuanto tiempo atrás estamos hablando,... pero curioso al menos.
Entretanto, "los nenes" incluido Pelusilla, se habían distanciado por delante, lo que les llevó a coger el camino equivocado y tener que desandar lo andado. Ahí nos reagrupamos y tomamos un carril dirección "La Tosquilla" interrumpido varias veces por dos pequeños arroyuelos que nos hacen echarnos la bici a cuestas. Finalmente salimos hasta la cantera de Benito y de ahí al Cortijo Matarratas, justo a pie de Pandera.
Sin más dilaciones afrontamos tan temido repecho, el más veterano como buen guía sale delante, con él los más jovencitos ávidos de emociones, y detrás el resto. Pronto se comienzan a formar los primeros grupettos. Por delante Gonzalo en solitario, tras él Pelusilla y los tres valdepeñeros (Aniceto y los chavales) a los que pronto se pega Pitchot, luego un terceto donde circulan Carlos Puche, Gustavo y el otro valdepeñero en liza (el que escribe) y detrás nuestra, bastante más distanciados los seis restantes (los chicos de oro del spinning, José Manuel, Carlos y Morón). El comienzo es suave, así que los primeros km discurren con normalidad. Algunos de inicio se hacen valer y muestran sus cartas, los demás mantenemos un ritmo bueno aunque sin excesos pues el puerto es largo. Así vemos como antes de afrontar el tramo más duro Gonzalo se ha distanciado bastante del resto, detrás Pelusilla en solitario y tras este Aniceto seguido de Pitchot. Nos sorprende la actitud relajada de Joaquín, al que esperábamos al frente del grupo, sin embargo se lo toma como un paseo y acompaña durante todo el trayecto al otro chaval. Más tarde nos enteraríamos que tiene sus entrenamientos condicionados por una serie de rutinas prefijadas en cuanto a tiempo e intensidad y que no puede salirse de ahí, y más en temporada baja y tras su reciente lesión. Eso lo explica todo.
Valdepeñas amanecía como suelen hacerlo los pueblos situados en un valle por estas fechas, cubierto con una suave neblina, que hacía más bonita si cabe su estampa, aunque ya sabemos que en este sentido yo no soy nada objetivo y se me ve el plumero como no podía ser de otro modo.
De 13-11-2010 la Pandera es Nitngera |
Esta vez si que fuimos puntuales y no hicimos esperar tontamente a nuestro gran anfitrión, Aniceto, un paisano al que hace casi un par de décadas tuve de profesor y con el que afortunadamente hoy día me vuelvo a reencontrar gracias al amor que ambos profesamos por los pedales.
De 13-11-2010 la Pandera es Nitngera |
Una docena de alcalaínos, o pseudoalcalainos, jejeje... nos desplazamos con la intención de hincar la bandera notinguera en todo lo alto de esa antigua base americana, en el infierno del Sur, y si que lo conseguimos sí,... como dice Andrés, desde el sábado pasado "La Pandera es Notinguera".
Junto a nosotros afrontaron este reto otros dos paisanos más, muy jovencitos por cierto, uno de ellos además bastante conocido ya en este mundillo de la bicicleta, Joaquín Torres, el chaval que tantas alegrías está dando ya a los aficionados al ciclismo de la Sierra Sur, con sus triunfos tanto a nivel autonómico como nacional,... por cierto que aparecía luciendo los colores del combinado nacional, no olvidemos que ya es habitual seleccionado en su categoría. Con él otro chaval del pueblo, y que tampoco rueda nada mal, Francisco creo que me dijo que se llamaba,... si no es así espero que me disculpe.
De 13-11-2010 la Pandera es Nitngera |
De los nuestros, la gran promesa, Gonzalito, uno nuevo, Carlos Puche, y su tocayo Carlos Rueda, Morón, José Manuel, Gustavo, Pelusilla, El Chirri, Andrés, Bolivar, Pitchot y Manuel (un servidor).
A escasos kilómetros de empezar la ruta, tomamos el carril emposlado del Torcal, y de repente pasamos de rodar tranquilamente a escalar rampas que han de rondar el 20%. Espero que Carlos desmienta o confirme estos datos pero por ahí debían de andar. En esos primeros metros empezamos ya a disfrutar de paisaje y paisanaje, como decía Aniceto, los dos grandes objetivos propuestos en la jornada de hoy. Pasamos por una zona preciosa, y que aún así no fue merecedora de retrataura, pues el desnivel impedía cualquier intento de echar mano a la talega y sacar la Polaroid. Lástima, pues entre los escasos huecos que dejaban los ocres de las nogueras, el verde del suelo, el gris plata del agua, y el marengo de las piedras, aparecían al fondo, como en perspectiva caballera y en otro gris mas azulado, las faldas de la Pandera. Continuamos rodando por encima de un yacimiento arqueológico, pues justo en ese punto, junto a una era, me comentaba Aniceto que se habían hallado restos de un antiguo asentamiento,... ya no sé de que cultura, ni de cuanto tiempo atrás estamos hablando,... pero curioso al menos.
Entretanto, "los nenes" incluido Pelusilla, se habían distanciado por delante, lo que les llevó a coger el camino equivocado y tener que desandar lo andado. Ahí nos reagrupamos y tomamos un carril dirección "La Tosquilla" interrumpido varias veces por dos pequeños arroyuelos que nos hacen echarnos la bici a cuestas. Finalmente salimos hasta la cantera de Benito y de ahí al Cortijo Matarratas, justo a pie de Pandera.
Sin más dilaciones afrontamos tan temido repecho, el más veterano como buen guía sale delante, con él los más jovencitos ávidos de emociones, y detrás el resto. Pronto se comienzan a formar los primeros grupettos. Por delante Gonzalo en solitario, tras él Pelusilla y los tres valdepeñeros (Aniceto y los chavales) a los que pronto se pega Pitchot, luego un terceto donde circulan Carlos Puche, Gustavo y el otro valdepeñero en liza (el que escribe) y detrás nuestra, bastante más distanciados los seis restantes (los chicos de oro del spinning, José Manuel, Carlos y Morón). El comienzo es suave, así que los primeros km discurren con normalidad. Algunos de inicio se hacen valer y muestran sus cartas, los demás mantenemos un ritmo bueno aunque sin excesos pues el puerto es largo. Así vemos como antes de afrontar el tramo más duro Gonzalo se ha distanciado bastante del resto, detrás Pelusilla en solitario y tras este Aniceto seguido de Pitchot. Nos sorprende la actitud relajada de Joaquín, al que esperábamos al frente del grupo, sin embargo se lo toma como un paseo y acompaña durante todo el trayecto al otro chaval. Más tarde nos enteraríamos que tiene sus entrenamientos condicionados por una serie de rutinas prefijadas en cuanto a tiempo e intensidad y que no puede salirse de ahí, y más en temporada baja y tras su reciente lesión. Eso lo explica todo.
En fin, para mí fue un gustazo tenerlo como referencia durante todo el puerto, ... manteniendo siempre unos 30-40 metros de distancia, y es que cuando la carretera comenzó a hacer tirabuzones y garabatos verticales del veintitantos por ciento, un servidor se encontró estupendamente y mientras mis compañeros de viaje mostraban cautela, empecé a tirar hacia delante y a distanciarme de ellos. Dos km de gran dureza a mitad de puerto, después un ligero descanso, bueno dejémoslo en rampas más suaves, y nuevamente otro golpe de tuerca, hasta alcanzar los ocho km y pico de ascensión,... en donde bajé un poco la intensidad y Carlos P. se me acercó hasta casi darme alcance. A esas alturas Gonzalo hacía ya 10 minutos que se había jalao el plátano y Pelusilla 5 que había echado la "meá". Pitchot y Aniceto se habían batido en duelo dos o tres minutos antes y los dos chavales acababan de llegar. Luego un servidor y al poco Carlos. Un poco más tarde Gustavo y buen rato después Santi, Bolívar y Andrés. Ya estábamos cogiendo frío cuando asomaron Morón y José Manuel y poco después entró Carlos cerrando el grupo. Caras de satisfacción entre el personal, y en nuestras miradas una consigna torera: La Pandera es notinguera. Olé!!
De 13-11-2010 la Pandera es Nitngera |
Nos encaramamos hasta el lugar más recóndito de la cima, una vieja caseta de piedra, de forma oval, con su chimenea,.... donde algún que otro quinto habrá hecho imaginaria sepultado por un nevero. Junto a esta, otra más moderna, típica alpina con tejado inclinado a dos aguas, y ambas encaramadas en un peñón al borde del precipicio;
y al final del mismo una radiografía del Quiebrajano a vista de pájaro. Espectacular,... sobrán las palabras,...
allí nos recreamos y nos olvidamos que estamos de ruta y que pese a llevar ya 900m de desnivel acumulado en apenas 14km aún nos quedan otros 36 por delante. Así es que muy a nuestro pesar, nos despedimos de Sierra Nevada, de Úbeda y Baeza, de la Parapanda, de la Sierra Ahíllos, de la capital del Santo Reino, de Sierra Mágina,... y de tantos y tantos pueblos y accidentes geográficos que desde sus 1872 m de altura se divisan.
De 13-11-2010 la Pandera es Nitngera |
y al final del mismo una radiografía del Quiebrajano a vista de pájaro. Espectacular,... sobrán las palabras,...
De 13-11-2010 la Pandera es Nitngera |
allí nos recreamos y nos olvidamos que estamos de ruta y que pese a llevar ya 900m de desnivel acumulado en apenas 14km aún nos quedan otros 36 por delante. Así es que muy a nuestro pesar, nos despedimos de Sierra Nevada, de Úbeda y Baeza, de la Parapanda, de la Sierra Ahíllos, de la capital del Santo Reino, de Sierra Mágina,... y de tantos y tantos pueblos y accidentes geográficos que desde sus 1872 m de altura se divisan.
La bajada espectacular, siempre digo lo mismo, pero es que es verdad,... y esta más que ninguna,... solo un dato: todos salimos a la vez, yo llegué tercero, al segundo le ví de lejos (el paisano de la melena) y a Joaquín ni le ví el pelo, ellos no llevaban velocímetro,... pero el mío en las rampas duras, ahora hacia abajo, marcó de velocidad máxima 81,6km/h que no es moco de pavo en esa carreterita de apenas 3 metros de anchura.
Después de la comilona, el postre. Aniceto nos había preparado un surtido a elegir en plena Montesina. Algunos se habían pegado tal atracón que apenas lo probaron. Pero el resto habíamos ido a comernos lo que nos pusieran, y eso hicimos. Yo cuando voy de guiso me hincho, ya haré dieta entre semana. El primer postrecillo un senderito de ida y vuelta, sube y baja rodando por el verde entre matorrales y esquivando piedras por doquier.
De segundo, un carril forestal entre pinares de unos 5km de ida y otros tantos de vuelta, que se empeñaba en bajarnos hasta donde no podía entrar la luz del día y en subirnos hasta la cima del cerro, permitiéndonos rodar a más de 40km/h a unos 1300m de altura en pleno monte, algo inaudito, y mostrándonos al suroeste algunos de los rincones más escondidos del pueblo (el trasero de la Morenilla, el acceso a Chircales desde el Castillo,...)
Y la guinda, otro carril forestal de semejantes características, bordeando el cerro bajo sus escarpados tajos por la parte delantera, para centrarnos frente a la principal ventana tectónica de Europa. Tal atracón de postres nos dimos que este último nos resultó un tanto indigesto, y es que la ida era en bajada, pero la vuelta,... picaba para arriba y a estas alturas estábamos bien "mauricos". Y aún quedaba un chupito con el que brindar,... la bajada por el Palenque hasta La Colmena, pero el tiempo lo impidió.
En fin, otra vez será. Esta bajada nos la debes Aniceto, y rutas como esta las que quieras. Nosotros te debemos más... una comida como Dios manda tras la ruta, para saborear los momentos vividos, así que en la próxima será obligatoria, y devolverte la visita en nuestro terreno (bueno en el de esta gente) y aunque lo tenemos difícil intentaremos que te vayas satisfecho. Muchas Gracias!!!
Os dejo por aquí unas pocas fotillos mías y otras tomas de Andrés.
Pdt. Si puedes Sergio nos haces una presentación de las tuyas. Y tu Carlos, a ver si puedes pasarnos al correo de los Notingan el track de la ruta que lo colguemos también. Gracias.
A juzgar por las imágenes sí que ha debido ser una ruta de las calificadas como espectacular. Magníficos paisajes, ¿a qué altura está la zona por la que habéis estado?. Además la mañana parece que era bastante fresquita por esas laderas pues vuestra vestimenta es ya más invernal, si es que hay que prevenir los catarros otoñales!!! Bueno pues quedo a la espera de esa buena crónica Manu. Chao.
ResponderEliminar¡ Qué buen sabor de boca se te ha debido de quedar por segunda vez! primero el día de la ruta y después al terminar de escribir la crónica.
ResponderEliminarMe alegro muchísimo que hayáis disfrutado tanto con esta super ruta, lástima que se la hayan perdido el resto de los notingueros, pero así hay excusa para repetirla de nuevo, ¿no crees?.
Y la próxima ¿dónde?. Es que estos relatos siempre me alegran el día así que ya estoy deseando leer el próximo. Una vez más, enhorabuena por compartir de una forma tan especial tus experiencias bikeras.
solo recalcar que yo no he ido nunca al spining, señor Manu, jejejje
ResponderEliminarGracias Ram,... la verdad es que anoche disfruté escribiéndola tanto o más que el sábado subiéndola,...
ResponderEliminarPor cierto José Manuel, los chicos de oro del spinning son Santi, Bolívar y Andrés. Leelo de nuevo que no lo has entendido bién.
"...los seis restantes (los chicos de oro del spinning, José Manuel, Carlos y Morón)".
Pues esta hay q repetirla en primavera, q para entonces ya tendremos las aceitunas recogidas. Me quedo con los dientes largos d no haber podio acompañaros, pero despues d leer esta cronica m queda la sensacion d haberla echo.
ResponderEliminarMuy buena ruta y por supuesto cronica Manu, desde aqui comentarle a Aniceto que cuando quiera preparamos una ruta por nuestros entornos.
ResponderEliminarSergio: Manu me he permitido el lujo de dividir el texto colocando las fotografias que mas me han gustado, espero no haber estropeado tu cronica, jejej, aunque yo creo que ahora esta mejor.
ResponderEliminarEso de La Pandera-Valdepeñas de Jaen te habra gustado.
PD. tengo el teclao estropeao y no puedo escribir acentos. i´m sorry.
Te lo agradezco por que yo al final no he podido hacerlo,... además me alegra ver que estás pendiente de esos detalles, como en los viejos tiempos, jejejeje. Ahora está mas ilustrada, claro que sí.
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